19.11.09

Píldora del día después, farmacias al margen de la ley

[Artículo publicado originalmente en el Periódico Diagonal]
PATRICIA HORRILLO - MADRID - 19/11/2009

Negarse a dispensar la píldora poscoital, que desde el 28 de septiembre se puede adquirir sin receta, no está amparado por ninguna ley. ¿Cuáles son los derechos de las consumidoras?


Si usted llega a una tienda y no tienen aquello que busca, se irá a otro lugar o puede que la persona que le atiende le ofrezca conseguirle lo que necesita en poco tiempo. Sin embargo, en una farmacia, el ofrecimiento no es optativo ya que, por ley, cualquier medicamento debe ser suministrado a un paciente, siempre que éste acredite su paso por el médico en caso de ser necesario.

Algo que parece tan evidente no ocurre en algunas oficinas de farmacia. En algunos establecimientos, si un ciudadano lleva una receta en la que aparezca Norlevo® o Postinor® se encontrará con una respuesta insólita: “Nosotros no trabajamos ese producto”. Para los profanos, éstos son los nombres de los dos medicamentos que contienen levonorgestrel, es decir, el anticonceptivo oral poscoital, más conocido como la píldora del día después (PDD), y que desde el 28 de septiembre se puede solicitar sin receta médica.

Muchas consumidoras no sabrán si esta respuesta es lícita o no, ya que desconocen sus derechos y la regulación de estos lugares. Es decir, que una farmacia no es un comercio cualquiera, sino una concesión administrativa al servicio de la ciudadanía, y que la negativa a dispensar un medicamento incurre en una ilegalidad que, pese a las inspecciones periódicas, es muy difícil de detectar.

Según la Ley del Medicamento, la negativa a vender un fármaco sin causa justificada (Art. 108.2.b.15) es considerada como falta grave. La obligación alcanza sólo a los medicamentos, no a los productos sanitarios. De ahí que un farmacéutico pueda negarse a despachar preservativos, ya que no infringe ninguna norma. El problema se plantea al haber incluido la PDD en la red sanitaria: cuando un médico receta un fármaco, un farmacéutico no puede negarse a venderlo porque intervendría en un acto médico perjudicando al enfermo.


Fuente: Periódico Diagonal


Tal y como está la legislación, las farmacias están obligadas a vender todos aquellos medicamentos catalogados como tales por el Ministerio de Sanidad. En el caso de la PDD está claro, puesto que es un medicamento. Puede haber alguna duda en aquellos casos en los que no quede clara la frontera entre un medicamento y un tratamiento terapéutico”, aclara el jurista y profesor de Derecho Administrativo Ricardo Iglesias.

Sin embargo, algunos responsables de farmacias declaran que no dispensan la PDD por una “cuestión de conciencia, porque es abortiva”. Pese a ser conscientes de que su decisión incurre en una ilegalidad, consideran que con la venta de estos medicamentos están invadiendo un espacio personal, y no están de acuerdo.

Un servicio público 

Cuando se otorga la apertura de una oficina de farmacia, su propietario firma un acuerdo con el Estado y con la sociedad basado en el servicio, no en la explotación de una empresa sin condiciones. “Las farmacias no dejan de ser una concesión administrativa sometida a la legislación estatal y autonómica para proporcionar una serie de servicios públicos a los ciudadanos”, aclara Iglesias.

Sin embargo, Alegría I., propietaria de uno de estos establecimientos, considera que puede tomar la decisión de no dispensar un medicamento. “Si tú tienes el negocio, tú puedes vender lo que quieras; mientras lo tenga que pagar yo, la decisión es mía”, argumenta. Aunque, para evitar problemas con los clientes, el mecanismo es desviarlos hacia otros establecimientos: “No las trabajamos; deberías ir a otra farmacia”.

Últimamente, cada vez más agrupaciones buscan eximirse de sus obligaciones escudándose en la objeción de conciencia ante una ley determinada. Sin embargo, es importante leer lo que el artículo 30, apartado 2, de la Constitución española recoge sobre ese tema: “La ley fijará las obligaciones militares de los españoles y regulará, con las debidas garantías, la objeción de conciencia, así como las demás causas de exención del servicio militar obligatorio, pudiendo imponer, en su caso, una prestación social sustitutoria”.

Por lo tanto, tal y como explica Iglesias, “la objeción de conciencia sólo está reconocida constitucionalmente en el ámbito militar, y otras ampliaciones no tienen un amparo legal. No haría falta modificar la Constitución, pero sería necesario regular esta materia en una ley orgánica. En la actualidad, todo queda al arbitrio de los tribunales”.

¿Forzar la venta? 

Pese a las limitaciones legales, existen posturas más flexibles. Núria Terribas, jurista y directora del Institut Borja de Bioética, limita el impacto de estas posiciones: “No se puede forzar a vender la PDD mientras no se trate de una farmacia que esté sola en un municipio y no deje desatendido al ciudadano. En zonas rurales es más discutible porque la objeción de conciencia del farmacéutico puede toparse con la demanda del usuario”.

LO QUE DICTA LA LEY
La Ley del Medicamento obliga a vender todos aquellos registrados por el Ministerio de Sanidad. No hacerlo sin causa justificada es considerado falta grave. En una farmacia, sin embargo, pueden negarse a vender preservativos, al ser productos sanitarios y no medicamentos.
FARMACIAS
Una farmacia no es un comercio ni se puede explotar como una empresa cualquiera. Cuando se otorga la apertura de una oficina de farmacia, su propietario firma un acuerdo con el Estado basado en el servicio público.
OBJECIÓN DE CONCIENCIA
La objeción de conciencia sólo está recogida en la Constitución para el ámbito militar. Según el jurista y profesor de Derecho Administrativo Ricardo Iglesias: “Sería necesario regular esta materia en una Ley Orgánica. En la actualidad, todo queda al arbitrio de los tribunales”.

9.9.09

Absuelto un alcalde que se negó a hablar en castellano

[Artículo publicado originalmente en el diario Público]
PATRICIA HORRILLO - BARCELONA - 09/09/2008 21:45

La Fiscalía decidió no presentar cargos en su contra


"Que se respeten los derechos lingüísticos de los catalanes", pidió Josep Andreu (ERC), alcalde de Montblanc (Tarragona), después de ser denunciado, según él, por expresarse en catalán. Andreu fue absuelto ayer después de que la Fiscalía decidiera no presentar cargos en su contra, tras ser acusado de desobediencia a la autoridad.

El pasado 30 de agosto, en la carretera de entrada al municipio, la Policía Local y la Guardia Civil habían montado un control. El alcalde y un concejal se acercaron para informarse por el dispositivo y, según Andreu, se dirigió a los agentes en catalán, a lo que respondieron: "Esto es España, hable en español".

Esto provocó una confrontación y Andreu exigió a los agentes que se identificaran, aunque él se negó a mostrar su DNI argumentando que era obligación suya conocer a las autoridades.
Finalmente, Andreu se identificó, lo que puso fin al incidente. Pero el pasado viernes el alcalde recibió una citación con una denuncia de la Guardia Civil por desobediencia a la autoridad.

"El desacato por no presentar el DNI es una excusa, ya que este incidente es un hecho motivado por la cuestión lingüística. Se ha hecho justicia, pero estoy preocupado porque esto pueda pasar a cualquier otro ciudadano", concluyó Andreu.

25.6.09

Cuando los escolares también programan

[Artículo publicado originalmente en El País]

569 alumnos de León y Ponferrada, menores de 12 años, participan en un programa piloto de aprendizaje de informática - La mitad de los voluntarios son niñas - Los padres, muy satisfechos con la experiencia, controlan a sus hijos el tiempo y las actividades ante el ordenador

P.Horrillo.- En el mundo físico, Raquel es gimnasta, y Sergio, futbolista. En el mundo virtual, Raquel cuida de los perros de Nintendogs y Sergio es general de los ejércitos de Imperium. Durante el pasado curso escolar, estos dos niños y 569 más de colegios de León y Ponferrada han aunado afición y deberes. Como actividad extraescolar voluntaria se dedicaron a programar desde cero hasta llegar a las 8.000 líneas de código. La experiencia, patrocinada por el Plan Avanza del Ministerio de Industria, ha derribado un par de tópicos: programar no es aburrido y la informática no es un terreno sólo de hombres, ya que la mitad de los asistentes al programa eran niñas.

Foto original de El País
Las madres han quedado tan contentas como sus hijos. "Ha aprendido mucho, aunque estaba jugando", dice Ana María Macho, madre de Raquel Salgado. "En casa no tenemos Internet, así que los juegos los debe mirar en el colegio antes de la clase de informática. El ordenador lo usa para las tareas del colegio y para algunos juegos, como Los Sims y los de animales de la Nintendo DS. Le gustan mucho". La madre de Sergio de la Puente, Reyes Rebollo, pide la clase de programación para todos los colegios. "Si volvieran a ofrecer el curso, Sergio iría aunque tuviera que pagarlo".

Que estén satisfechos con la actividad extraescolar no significan que den carta blanca al uso del ordenador en sus hogares. Controlan a sus hijos el tiempo y el acceso a Internet."Les propuse a mis compañeros hacer un juego de marcianos, y les pareció buena idea. Ahora, hemos ganado un premio y estoy pensando en mejorar el programa... Sobre todo para jugar yo". Sergio, con tan sólo 11 años, fue capaz de diseñar un juego de marcianos con más de 8.000 líneas en un lenguaje de programación sencillo y divertido, pensado para niños, llamado Phrogram.

El mérito lo comparte con sus compañeros de equipo. "Yo me encargaba de la pantalla del juego, en la que se movían las naves, Javi de la de inicio, con las instrucciones de las teclas, y de la final en la que aparece Game Over, y Álvaro hizo la documentación del proyecto que había que entregar".

Contratiempos superados

Antes de esta actividad extraescolar, los juegos eran siempre de otros. "En el curso, teníamos que conseguir que el ordenador nos obedeciera y aprendimos a hacer nuestros programas. He pasado de ser un usuario a ser programador", explica Sergio, satisfecho de una hazaña no exenta de complicaciones. "Se me estropeó el pen-drive, se perdió parte del programa, tuve que recuperarlo, me acordaba de lo que había puesto, unas naves que se movían, y entre todos lo sacamos".

La experiencia les ha servido para ganar el segundo premio del concurso de programación infantil de Castilla y León para niños mayores de nueve años.

El curso KPL (Kid's Programming Language) Diviértete programando ha sido una prueba piloto pionera en el mundo, según Tomás Castro, presidente de la Asociación Leonesa de Empresarios de Tecnología de la Información y las Comunicaciones (ALETIC). La experiencia se ha seguido en 22 centros de León y Ponferrada. El objetivo era acercar la programación a estudiantes de 5º y 6º de primaria, y ha conseguido seducir a los niños y a los adultos. "Por lo que me enseñaba mi hijo", recuerda la madre de Sergio, "era un lenguaje muy parecido al profesional. Creo que ha sido una idea muy buena. Si hubiera dinero, lo deberían hacer en más colegios".

A los responsables de KPL también les gustaría que el curso formara parte del sistema educativo español, "para cambiar el método tradicional de enseñanza", explica Castro. "En la sociedad, el nivel de conocimiento de las tecnologías es muy básico, y no las estamos explotando para poner en marcha nuestra creatividad. Por eso, hemos querido ver si los niños pueden hacerlo". De momento, las conclusiones que han extraído al finalizar la prueba les avalan: más del 90% de los 569 participantes se declaran satisfechos.

El plan no se aplicó al margen de los profesores. Los docentes también están contentos con la iniciativa, pese a sentir que han faltado sesiones para profundizar. "Al tratarse de una prueba piloto, es difícil saber cuánto tiempo se va a tardar en explicar alguno de los temas, y la planificación suele fallar", explica Luis Ángel Cancelo, coordinador pedagógico del proyecto. Más allá de los temas de calendario, resulta difícil imaginar cómo se puede hacer entender a unos niños de entre 9 y 12 años un lenguaje de programación, por intuitivo que sea. "Les preguntábamos a los estudiantes las acciones y los ingredientes necesarios para elaborar una receta de cocina y, después, buscábamos las correspondencias para que lo visualizaran en órdenes dirigidas al ordenador", aclara Cancelo.

Una enseñanza diferente

"El planteamiento inicial fue enseñar la informática de una manera diferente, estableciendo equivalencias entre actividades de la vida real y acciones que se pueden crear a través del lenguaje de programación". Cancelo y los nueve docentes que impartieron los cursos han visto a los alumnos perder el miedo a las herramientas de desarrollo y empezar a crear.

"Fácil no ha sido, pero al final conseguí que mi juego funcionara", explica la campeona Raquel (11 años). "Mi programa era un Cupido que disparaba flechas y sumaba puntos al dar a los corazones que caían por la pantalla".

La mitad de los alumnos que han participado en la actividad extraescolar han sido niñas. "Estábamos en desigualdad de género en las carreras tecnológicas, pero esa realidad está cambiando. Al aplicar la lógica, chicos y chicas funcionan igual de bien", concluye Castro.

De los tres premios entregados tras el curso, dos fueron para niñas. Tras Raquel y Sergio, María Guzmán ganó el tercero, con un juego para aprender los países de Europa. María (12 años) le encuentra otra ventaja al curso: "Como el lenguaje estaba en inglés, también he podido practicar el idioma".

Supervisión parental

María le da al tenis y al baloncesto en la vida real, y al Brain Training y al Sing Star en la virtual. Los tres tienen consolas de videojuegos y sacan buenas notas, pero los padres controlan su interacción con las nuevas tecnologías. A Rosa Cortés, la madre de María, no le gusta que su hija lea sobre sucesos en Internet, y Reyes Rebollo, la madre de Sergio, le ha prohibido el Messenger. "Tiene correo electrónico, tiene teléfono... También le hemos explicado que todo lo que uno pone en Internet deja de ser de su propiedad; das una licencia para que cualquiera lo utilice. Y lo ha entendido perfectamente".

El curso de informática ha cambiado la vida de estas familias. La campeona Raquel es la que lo ha llevado más lejos. Antes quería ser veterinaria; ahora, informática.

3.2.09

La delgada línea roja

Una pieza del informativo del lunes a la noche quiere explicar la reunión entre el presidente Zapatero y los bancos españoles. Para ello utiliza, no sólo varias imágenes de una entidad financiera concreta (el Santander), sino también parte de su publicidad de radio. Aparentemente, es para ilustrar la información. Sin embargo, genera una cierta sospecha cuando al resto de bancos, que también aparecen en la pieza, no se les da la misma "publicidad".

Pero hay más. La voz en off nos cuenta que el presidente del Gobierno reitera su petición a los bancos para que ofrezcan más créditos a las empresas y a las familias. A lo que le siguen unas imágenes del presidente del Santander muy sonriente: "Emilio Botín levanta el pulgar y contesta así a las continuas exigencias de Zapatero".

Hay un dato que se omite: las imágenes corresponden a la semana pasada, cuando Botín hizo públicas las cifras de beneficios.

La frase quiere reflejar ironía y sarcasmo, como diciendo "sí, sí, Botín sonríe y te dice que vale, pero en realidad pasa de ti", un elemento de opinión que no encaja en la pieza de ninguna manera. Pero lo que es peor: la afirmación "contesta así a Zapatero" es falsa.

25.1.09

El Periódico de Catalunya - Análisis de la portada del 25/01/2009

En la portada del 25 de enero de 2009 del diario El Periódico de Catalunya, el lector pudo observar bajo el titular “Vendaval tràgic” la imagen de cuatro niños que habían fallecido el día anterior por el hundimiento de un pabellón de juego a causa del viento. Las fotografías, de tamaño carnet y en las que se veía a los niños con atuendos propios del juego que practicaban (gorra, casco,...), coronaban la imagen principal del día que mostraba los escombros de la zona del incidente y algunos elementos que recordaban la presencia de los menores y del deporte en el lugar: una gorra, una pelota, un bate de béisbol...



Pese a ser un hecho dramático y cercano (ocurrió en Sant Boi), no es el tema que trata lo que supone un problema ético para la redacción del diario, sino la inclusión de las fotografías de los niños en la portada (y/o en el interior) de la publicación. La pregunta que surge es si la presencia de estas imágenes cumple con el principio periodístico de informar sin atentar contra otros derechos de protección a la imagen de un menor. Es decir, ¿el periódico podría haber dado la información y haber hecho trascender la conmoción social del accidente sin utilizar unas fotografías que, objetivamente, no ofrecen al lector más datos para entender lo ocurrido?

Para analizar el caso he recurrido, en primer lugar, al Estatuto de Redacción de El Periódico de Catalunya, que deja bastante clara la posición del diario en lo que se refiere a estos temas:

Los principios generales que rigen estas relaciones son los que se derivan de la Constitución Española, el Estatut de Catalunya, el proyecto de Código de Honor Profesional de la ONU, la Declaración de Derechos y Deberes de los periodistas de la CE y el Código Deontológico del Col•legi de Periodistes de Catalunya.

II. DERECHOS Y DEBERES PROFESIONALES
6) Se respetará la intimidad de las personas, sobre todo en casos que generan situaciones de aflicción, evitando la intromisión gratuita y las especulaciones innecesarias sobre sus sentimientos y circunstancias, especialmente cuando las personas afectadas expliciten su oposición.
8) Habrá un especial cuidado en el tratamiento de las informaciones que afectan a menores, evitando difundir su identidad cuando aparezcan como protagonistas de cualquier causa criminal, ya sean víctimas, testigos o inculpados de las mismas, sobre todo en asuntos de trascendencia social, como es el caso de los delitos sexuales.

Siguiendo el orden de los códigos deontológicos a consultar, incluyo también el artículo correspondiente del Col•legi de Periodistes de Catalunya que, de alguna manera, ya quedaba reflejado en el Estatuto de El Periódico:

11) Tractar amb especial cura tota informació que afecti a menors, evitant difondre la seva identificació quan apareixen com a víctimes (excepte en supòsit d'homicidi), testimonis o inculpats en causes criminals, sobretot en assumptes d'especial transcendència social, com és el cas dels delictes sexuals. També s'evitarà identificar contra la seva voluntat les persones pròximes o parents innocents d'acusats o convictes en procediments penals.

Por último, he consultado El Código Deontológico de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE), que recoge unos principios similares en cuanto a la protección a la imagen del menor y más cuando son referidos a situaciones de tragedia:

4) Sin perjuicio de proteger el derecho de los ciudadanos a estar informados, el periodista respetará el derecho de las personas a su propia intimidad e imagen, teniendo presente que:
b) En el tratamiento informativo de los asuntos en que medien elementos de dolor o aflicción en las personas afectadas, el periodista evitará la intromisión gratuita y las especulaciones innecesarias sobre sus sentimientos y circunstancias.
d) Se prestará especial atención al tratamiento de asuntos que afecten a la infancia y a la juventud y se respetará el derecho a la intimidad de los menores.

6) Los criterios indicados en los dos principios anteriores se aplicarán con extremo rigor cuando la información pueda afectar a menores de edad. En particular, el periodista deberá abstenerse de entrevistar, fotografiar o grabar a los menores de edad sobre temas relacionados con actividades delictivas o enmarcables en el ámbito de la privacidad.

Desde mi punto de vista, la respuesta es clara: el diario no necesitaba el apoyo gráfico específico de los niños para dar la noticia. Creo que El Periódico optó por incluir las imágenes por la cercanía de las muertes a sus lectores. Aunque las fotos hubieran aparecido sólo en el interior del diario, la decisión seguiría entrando en conflicto con los derechos del menor, pero no habría sido una acción tan flagrante.

Además, debido a las características de las fotografías, resulta fácil imaginar que pertenecen al registro del pabellón de béisbol. El equipo podría ser el que difundió estas imágenes de las fichas de los jugadores. Si así fuera, ya que en todo registro (público o privado) la información es confidencial (la fotografía es considerada dato por la Agencia Española de Protección de Datos), se cometería una falta no sólo en términos éticos, sino que también se podría estar incurriendo en un delito de difusión de material privado.

Por último, sería conveniente saber si se solicitó permiso para la publicación de estas imágenes a los padres de los fallecidos. Sin embargo, aunque así fuera, cosa que dudo, se estaría igualmente atentando contra la intimidad de los menores.

Para futuros casos de este tipo, yo recomendaría que no se incluyera ninguna imagen de un menor (vivo o muerto). De ser necesario, por algún tema relacionado con la comprensión de la información, creo que sería conveniente o bien pixelar la zona de los ojos o bien colocar una franja negra sobre los mismos, para dificultar la identificación del mismo y salvaguardar su derecho a la propia imagen. También añadiría una puntualización en el Estatuto de Redacción de El Periódico (punto 8) cuando dice:

8) Habrá un especial cuidado en el tratamiento de las informaciones que afectan a menores, evitando difundir su identidad cuando aparezcan como protagonistas de cualquier causa criminal o accdiente, ya sean víctimas, testigos o inculpados de las mismas, sobre todo en asuntos de trascendencia social, como es el caso de los delitos sexuales.

De esta manera, no sólo cuando el menor forme parte, en algún sentido, de una causa criminal, sino también cuando sea víctima o testigo de un accidente, deberá quedar clara la posición del diario: no difundir su imagen.

24.1.09

¿Pepegueit?

Tras el sumario, organizado por orden de importancia (se supone), el telespectador piensa que la primera noticia que le explicarán en el informativo es la de máxima relevancia del día. Al menos así se lo han hecho saber en la enumeración inicial. Sin embargo, sin un motivo aparente, Cristina Villanueva introduce un "pequeño" cambio: la primera noticia no va a ser la de los efectos del temporal de viento que ha provocado, entre otras cosas, la muerte de cuatro niños en Sant Boi (Barcelona). En su lugar, y con una gran sonrisa, la periodista anuncia el encuentro entre la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, y el alcalde de la capital, Alberto Ruiz-Gallardón.

Detrás de su figura aparece un letrero en el que se puede leer PP-Gate (tal paralelismo sólo se puede establecer si no se ha leído sobre el caso) y se ven unos dibujos sacados de los créditos de la película de Steven Spilverg "Catch Me If You Can" ("Atrápame si puedes", 2002), entre los que está la silueta de un policía (representado por Tom Hanks) y que ellos pretenden que sea la de un espía (porque es lo que les encaja con la historia que están contando), y de los que sería interesante saber si han pagado los derechos de imagen.

El tono de Villanueva, entre jocoso y divertido, no se entiende en ningún caso, y sus palabras más bien parecen referirse a una fiesta o a una entrega de premios que a una noticia de política: "Hoy, todo han sido abrazos camaleónicos, sonrisas entre dientes, y aparente buen rollito en las filas del PP madrileño".


Luego, en el desarrollo de la información, no explican más que de pasada cuál era el motivo de ese Primer Foro Abierto del Partido Popular, que aunque pueda considerarse de poco interés, es la verdadera excusa en la que se asienta la noticia. Sin embargo, todo se resume al puro cotilleo sobre si Aguirre y Gallardón sen han dado un par de besos.

No contentos con ello, la segunda noticia sigue sin ser la de las consecuencias del vendaval sino que, enganchando con la información del PP en la que aparecen miembros de Facebook que se han juntado en ese foro abierto con el presidente del PP, Mariano Rajoy, continúan hablando de los datos que aparecen en las redes sociales por Internet. Todo un alarde de coherencia informativa.

13.1.09

La Vanguardia – Análisis de la portada del 11/12/2008

En la portada del 11 de diciembre de 2008 del diario La Vanguardia el lector puede observar, a todo color y en la mitad derecha de la portada, la fotografía de Hannah Jones, una niña británica de 13 años que, debido a la decisión de rechazar un transplante de corazón, ha abierto una polémica en torno a la autonomía de un menor de edad para decidir sobre su salud y su futuro. Sin embargo, no es el tema que trata lo que supone un problema ético para la redacción del diario, sino la inclusión de la fotografía de la niña, de hecho, una imagen preparada en su cuarto, en la portada de la publicación. La pregunta que surge es si aquella foto cumple con el principio periodístico de informar sin atentar con otros derechos de protección a la imagen de un menor. Es decir, ¿el periódico podría haber dado la información y haber abierto igualmente el debate de fondo sin utilizar una imagen que, objetivamente, no ofrece al lector más datos para analizar el caso?

Desde mi punto de vista la respuesta es clara: el diario no necesitaba el apoyo gráfico para dar la noticia y plantear un debate social tan polémico como el de este caso. Sin embargo, considero que La Vanguardia optó por incluir la imagen como reclamo para sus lectores. Ofrece ese punto de morbo (pese a que la foto no refleja más que a una niña sentada sobre la cama de su habitación, el lector pensará que está observando al futuro cadáver de una niña) con el que se intenta enganchar al público. Pese a que este diario no se caracteriza por su sensacionalismo, lo cierto es que en este caso pecó de amarillista y optó por dar una imagen de una niña de 13 años, posando para la publicación, porque era un elemento de peso en la portada.

Si esta imagen la hubieran utilizado sólo en el interior del diario, seguiría entrando en conflicto con los derechos del menor, pero no habría sido una acción tan flagrante.

Según el código deontológico del periodista que aparece en el wikipedia [http://es.wikipedia.org/wiki/C%C3%B3digo_deontol%C3%B3gico_del_periodista] hay una serie de principios a la hora de encarar una noticia:

• El respeto a la verdad.
• Estar abierto a la investigación de los hechos.
• Perseguir la objetividad aunque se sepa inaccesible.
• Contrastar los datos con cuantas fuentes periodísticas sean precisas.
• Diferenciar con claridad entre información y opinión.
• Enfrentar, cuando existan, las versiones sobre un hecho.
• Respeto a la presunción de inocencia.
• Rectificación de las informaciones erróneas.

No es que la fotografía de la niña falte a alguno de estos principios, ya que no es una imagen retocada (aunque sea preparada), es decir que respeta “la verdad”. Sin embargo, habría que saber si a través de ella es más fácil acercarse a la noticia o si su visión posiciona al lector de alguna manera “no informativa”.

Si La Vanguardia tiene una posición conservadora con respecto a este tema (el hecho de que un menor decida por su vida entra en conflicto con sus ideas, leyendo el editorial de ese día), y considera que la niña de 13 años es demasiado pequeña para tomar determinadas decisiones, la foto “apoyará” en cierto sentido su tesis, ya que la imagen es de una adolescente de aspecto infantil (parece más pequeña de la edad que tiene) y desvalido que “debe ser protegida”. Posiblemente, la inclusión de la fotografía logra un doble propósito: funciona como reclamo de portada (le pone cara y ojos a una noticia de otro país, con el morbo que implica que sea una menor la que cuestiona las leyes), y acerca al lector a una postura más conservadora (“una niña pequeña no debería tener potestad para decidir algo así”).